El Arte de Farolear en la Música

Texto copiado y editado de una vieja revista, que tal vez ya no sigue en circulacion. 

Siempre que se asiste a conciertos  hay un punto en común en cada uno de ellos: las pláticas clavadas en la música. Llegas a tu asiento (puesto), y están los de atrás y adelante haciendo competencia para saber quien sabe más al respecto. Vas por una cerveza y mientras degustas la esencia etílica, nuevamente surge la conversación. Sin embargo siempre existe un personaje que domina toda la discusión, sorprendiendo con cientos de datos al que se deje. Un farol profesional.

Es una competencia de egos, que sólo puede ser comprendida perfectamente entre faroles, wannabes capaces de utilizar grandes frases, aunque no se acerquen mínimamente a la verdad: “Radiohead nunca vendrá a México”, “el ultimo disco de Metallica es completamente diferente a lo que han hecho anteriormente”. La experiencia demuestra que el 99% de las veces, el personaje que tanto habla y presume no tiene idea de lo que dice, su lema es “aprender a aparentar en todo sin saber de nada”.

Todos nos hemos encontrado un farol o, para qué negarlo, tenemos uno incrustado que sale a relucir cuando andamos medio ebrios. El farol es puro estilo, pero es necesario dominar las técnicas básicas: llevar siempre la contraria, la invención de datos (entre mas espectaculares mejor), dudar sistemáticamente de la información facilitada por el contrincante, mantener hasta limites inconcebibles las posturas y gritar mucho, Una vez dominadas las técnicas básicas, el triunfo en una conversación está garantizada al menos en un 40%. “Todo el mundo tiene miedo de quedar como analfabeta, la mayoría asiente en silencio o dice “ah claro!”. En el arte de bufflear todo vale, sobre todo cuando lo dice una cara seria y segura.

 

PRINCIPIANTES

Además de los elementos básicos, es necesario aprender algunas reglas en la música, como que el rock se ha caracterizado por su movimiento de péndulo: un año mandan los estadounidenses y al siguiente los británicos, de vez en cuando surge algún sueco, alemán o francés, pero aun así la formula se mantiene.

Analizando lo que en la actualidad suena en la radio, podemos saber lo que funcionará al año siguiente. Sumamente fácil. La otra cosa que necesitas saber, si es que vas a dedicarte profesionalmente al farolismo, es que la música la puedes dividir en cinco líneas básicas: 50s, Rock’n’Roll; 60s, Psicodelia y Beatles; 70s, hasta el 75, glam, heavy metal y rock sinfónico, después, punk y new wave; 80s, tecno-pop y metal; 90s, movimiento alternativo y para los que viven en el recuerdo “ ya no se hace música como antes” ¿Dónde quedaron los otros géneros? En este momento no los necesitas, utilizar palabras como art-punk, emo, shock rock, o cualquier otra corriente es parte de las técnicas avanzadas.

Al principio todo mundo te ganará en la discusión, por lo que debes aprender de los expertos (faroles y verdaderos conocedores). Si ves que un tipo sabe mucho sobre algún tema en concreto, pon atención y graba cada detalle de lo que habló (discos, anécdotas, etc.). Todo puede servir en futuras batallas. Aunque si vas por lo seguro, lo mejor es apoyar un estilo que no le guste a la mayoría, pero así no tendrás con quien discutir, no tiene caso.

INTERMEDIOS

El farol medio experimentado sabe cómo actuar, cuando escucha los razonamientos del contrario bebe o fuma constantemente (como si no tomara importancia a sus comentarios), mientras esboza una sonrisa incrédula, porque hay que aclararlo, el que bluffea realmente cree su papel de gurú musical. El único momento en que un farol se tambalea es cuando se encuentra con un fan infernal o un verdadero conocedor, pero con el lema de “el que nada sabe, nada teme” puede mostrarse de acuerdo en algunos puntos. También puedes recurrir a la frase “la neta a mi me gusta lo auténtico, no me entra lo comercial”, e inmediatamente esconderse en Tom Waits, Frank Zappa, el blues y el jazz. En ese terreno son muy pocos los que le entran a la discusión.

Otra forma de dejar callados a algunos es hablar sobre los próximo lanzamientos, casi nadie está pendiente de los miles de discos que saldrán a la venta. Saber de primera mano que un grupo ya está en el estudio y que pronto saldrá un nuevo álbum siempre alegra a alguien. Estar pendientes de la fórmula del péndulo también ayuda, sin embargo a éste nivel ya debes utilizar nombres, que a todo mundo le sonarán extraños y te brindaran la atención inmediatamente. La memorización de datos inservibles y anécdotas siempre es útil, conocer las exigencias de algunos grupos antes de un concierto, el nombre de los perros y gatos de la familia Osbourne, son conocimientos que siempre serán apreciados.

AVANZADOS

Una vez superados los primeros baches en la liga media, entras al terreno donde dominas el tema como si lo hubieras vivido. Habla de Seattle, Nueva York y Manchester como sí caminaras por ahí todos los días, sacando a relucir el parentesco entre las bandas de esa escena. Agrega a tu conversación detalles sobre lugares en donde tocaban The Doors, describe a la perfección The Cavern en Liverpool y el CBGB’S en Nueva York. Tambien facilita las cosas hablar de los músicos como si fueran tus cuates. Ninguno tiene apellidos, sólo nombres de pila: John (Lennon), Jack y Meg (White), Fred (Durst) y Daron (Malakian). Aunque hay casos especiales como (Jim) Morrison, (Janis) Joplin y (Bob) Dylan.
Ya en la línea de los expertos, puedes utilizar palabras en ingles (aunque no sepas que significan); hype, fade-in, bootleg, out-take, gig, mainstream, crossover, etc. Otro recurso, que siempre funciona bien, es conocer las letras de las canciones. La mayoría de las veces nadie sabe de que hablan esos tipos, así que soltar de vez en cuando una frase completa, bien digerida y explicada siempre apantalla.

Si lo consigues aplicar a la perfección cada una de las técnicas estarás listo para farolear como un profesional o dar el gatazo de “conocedor”, al menos con las bases suficientes para no dar pena o risa